Bubble Club de Philippe Starck
¿Os acordáis que el año pasado en este post os hablé del hotel diseñado por Philippe Starck en Marsella? Pues esta pasada Semana Santa estuve unos días en París y no lo dudé a la hora de buscar el alojamiento, reservé en el Mama Shelter París. Y la verdad es que no me decepcionó en absoluto. Situado en el distrito 20 de la capital francesa, es un hotel joven y con un espíritu cosmopolita. Las zonas comunes y las habitaciones siguen la línea del hotel de Marsella, con una decoración divertida, inteligente, llena de los guiños que caracterizan la obra del diseñador francés, como las caretas de Batman que “adornaban” mi habitación. Además, el trato del personal fue estupendo y el ambiente, especialmente por las noches, lo convierten en uno de los lugares de moda de esa zona. Pero sin duda, una de las cosas que más disfruté, fue empezar las mañanas desayunando mi café y mi croissant en uno de los sofás Bubble Club situados en la terraza de la planta baja. ¡Qué lujazo! Primero, porque el croissant estaba delicioso, y segundo, porque la colección Bubble Club son, sin duda, mis piezas de exterior preferidas.
Y aunque hoy estemos muy acostumbrados a su original forma (en La Oca son un top ventas todos los años), en su momento fue toda una revolución, ya que se convirtió en el primer sofá de fabricación industrial y realizado por completo en polietileno. Cómo hemos comentado en otras ocasiones al hablar de algunos de sus diseños, (como las sillas Louis Ghost), el francés gusta de apropiarse y revisar elementos del pasado y darles un giro cargado de inteligencia e ironía. Lo mismo ocurre con el sofá Bubble Club (o su versión en butaca), que recrea el tradicional sofá de dos plazas, con respaldo y reposabrazos, que Starck reinterpreta y convierte en una pieza contemporánea de gran belleza y funcionalidad.
Lo podéis encontrar en varios colores, y su material, insensible a las ralladuras y resistente al sol y al agua, lo convierten en una fabulosa opción para decorar vuestras terrazas y jardines.
¿Qué os parece? ¿Os gusta este icono del diseño? A mi me encantan sus líneas minimalistas y su versatilidad, que le permiten integrarse en diferentes ambientes, rústicos o contemporáneos. Estoy deseando poner un Bubble Club en mi vida.
Impresionante, no lo conocía.
Gracias por el descubrimiento
Bss
Es como si este post lo estuviese escribiendo yo, veo que no soy el único loco enamorado del diseño del “ciudadano del mundo” (Starck).
Me ha encantado la entrada que escribes, y sin duda, que en la Maison&Objet de este año no dudaré en reservar en ese sitio…. ¡tengo que tocar el cielo!
Saludos, y muchas gracias por el tip!
Bayron